Mar del Plata es reconocida por sus playas y su atractivo turístico, pero en los últimos años algunos sectores han adquirido notoriedad debido al incremento de la criminalidad. Analizar los barrios peligrosos en esta ciudad implica identificar aquellos puntos donde la vulnerabilidad delictual preocupa cada vez más tanto a residentes como a visitantes. El ranking de inseguridad resalta las zonas conflictivas, donde los robos y hurtos se multiplican y la presencia de ladrones y motochorros es cada vez más frecuente.
A continuación se presentan, uno por uno, los principales barrios con mayor criminalidad de Mar del Plata, detallando sus particularidades y brindando información concreta para quienes desean conocer en profundidad las zonas inseguras de la ciudad.
Barrios de Parque Camet y de Las Heras
Parque Camet y Las Heras suelen ocupar los primeros lugares en cualquier lista de barrios peligrosos. Sus habitantes denuncian reiterados hechos delictivos, lo que convierte a estas áreas en verdaderos focos críticos dentro del ranking de inseguridad local. Los robos y hurtos han aumentado, generando un clima de temor entre quienes viven allí.
En ambos barrios, la presencia policial resulta insuficiente para frenar el accionar de los chorros, quienes aprovechan sectores poco transitados y calles con deficiente iluminación. Son frecuentes los episodios vinculados a motochorros, sobre todo en horarios nocturnos o durante la madrugada.
Situación actual de Parque Camet
En Parque Camet, la gran extensión geográfica y la baja densidad de población se combinan con la falta de patrullaje constante, facilitando que la delincuencia actúe sin mayores trabas. La cercanía a caminos rurales representa una vía de escape ideal para los malvivientes tras cometer asaltos. En muchas ciudades del mundo, existen zonas urbanas que comparten características similares y se incluyen dentro de los barrios más peligrosos a nivel mundial por sus altos índices de criminalidad.
Vecinos relatan que los robos a viviendas y los arrebatos en la vía pública son habituales, aumentando la preocupación por la seguridad barrial. Los motochorros circulan por calles internas, donde logran pasar desapercibidos para cometer delitos rápidamente.
Historia y realidad delictiva de Las Heras
El barrio Las Heras arrastra un prolongado historial de conflictos sociales y carencias en infraestructura, factores que favorecen la aparición de focos de delincuencia. El desorden urbano facilita el movimiento de los ladrones y complica la intervención policial eficaz.
Principalmente jóvenes forman grupos dedicados a arrebatos y a la comercialización de bienes robados en otras zonas. Comercios locales reportan reiterados intentos de robo, lo que los ha llevado a implementar medidas de protección adicionales.
Barrios de Villa Evita y de Pampa
En el sur de Mar del Plata, Villa Evita y Pampa aparecen asociadas a elevados niveles de vulnerabilidad delictual. Ambos barrios sufren oleadas de asaltos y la notable presencia de bandas que operan principalmente durante la noche.
La sensación de riesgo es elevada, llevando a muchos vecinos a reforzar puertas y ventanas e incluso modificar rutinas diarias ante el temor a ataques inesperados.
Delincuencia organizada en Villa Evita
En Villa Evita, la criminalidad está vinculada a grupos organizados de ladrones que estudian los movimientos de los habitantes antes de actuar. Estos chorros planifican entradas a domicilio aprovechando momentos de poca vigilancia barrial.
Recientemente se ha observado un aumento en hechos violentos, incluyendo enfrentamientos armados entre bandas rivales en plena calle, lo que incrementa el clima de temor entre las familias del área.
Zona insegura y vulnerable en Pampa
Pampa presenta problemas similares, aunque aquí resalta la frecuencia de motochorros y atracos rápidos a peatones desprevenidos. La proximidad a rutas y descampados facilita la huida de los delincuentes.
En Argentina, además de Mar del Plata, hay ciudades que también registran barrios identificados por su alta percepción de inseguridad y constantes desafíos comunitarios, como sucede con algunos barrios peligrosos en Elche donde la problemática social y urbana exige acciones integrales.
Barrios de Fray Luis Beltrán y de Puerto
Fray Luis Beltrán y la zona del Puerto enfrentan desafíos propios respecto a la inseguridad. Aunque cuentan con importante movimiento comercial y tránsito de personas, estos sectores presentan altos índices de robos y hurtos.
La diversidad de públicos y la circulación diaria resultan atractivas para ladrones y bandas de motochorros especializados en atacar a turistas y trabajadores.
El robo hormiga como modalidad principal en Fray Luis Beltrán
En Fray Luis Beltrán predomina la modalidad conocida como “robo hormiga”, pequeños hurtos diarios que afectan tanto comercios como viviendas particulares, deteriorando así la tranquilidad vecinal.
La vigilancia ciudadana y las cámaras privadas no siempre logran disuadir a los maleantes, quienes aprovechan tramos sin supervisión para actuar sin ser detectados.
Turismo y criminalidad en tensión en Puerto
El Puerto de Mar del Plata, famoso por su gastronomía, tampoco escapa a los altos niveles de delincuencia. Son comunes los robos rápidos a turistas distraídos y a vehículos estacionados en la zona.
A pesar de la presencia policial reforzada en algunas temporadas, la zona permanece vulnerable, especialmente durante eventos masivos o fines de semana largos.
Otros barrios bajo alerta por criminalidad en Mar del Plata
Más allá de los casos emblemáticos, existen otros sectores con vulnerabilidad delictual preocupante. Algunos sorprenden porque históricamente gozaban de una imagen tranquila, pero las estadísticas recientes revelan lo contrario.
Santa Mónica, Santa Celina, Los Troncos, Playa Grande, Centro, San Juan, Villa Lourdes y Caribe también presentan desafíos en materia de inseguridad, aunque varían tanto el tipo de delito como el contexto barrial.
| 🏙️ Barrio | ⚠️ Tipo de delito frecuente | 👮♂️ Medidas habituales |
|---|---|---|
| Santa Mónica | Robos domiciliarios | Cámaras privadas, alarmas |
| Santa Celina | Motochorros, hurtos callejeros | Refuerzo policial solicitado |
| Los Troncos | Asaltos rápidos y boqueteros | Cerramientos perimetrales |
| Playa Grande | Robo automotor, arrebatos turísticos | Puestos móviles de policía |
| Centro | Pungas y carteristas | Mayor iluminación peatonal |
| San Juan | Allanamientos violentos, hurtos | Red de prevención vecinal |
| Villa Lourdes | Robos en baldíos | Denuncias comunitarias activas |
| Caribe | Intrusión y usurpación | Barreras físicas y patrullaje |
Estos barrios requieren acciones coordinadas frente a nuevas formas de delincuencia y cambios en la dinámica social urbana. Mientras se implementan distintas estrategias para mejorar la seguridad, la percepción de vulnerabilidad persiste, sobre todo durante la noche o en épocas de alta concurrencia turística.
Conclusión
La problemática demuestra cómo la inseguridad trasciende determinados barrios peligrosos y afecta paulatinamente a toda la trama urbana de Mar del Plata, planteando el desafío permanente de encontrar soluciones efectivas frente al avance de la criminalidad y la presencia de ladrones y motochorros.